Entre más se acerca el final del embarazo más se suben las ansias de conocer a tu bebé, así como posiblemente la ansiedad por su llegada, los nervios de que todo salga bien, y también un sin número de nuevas sensaciones en tu cuerpo que avisan que la llegada de tu bebé está cerca; algunas de estas nuevas experiencias se podrían incluso confundir con sensaciones que ya has sentido durante el embarazo.
Como tus amigos de cocco & lolo siempre queremos acompañarte y guiarte en esta importante etapa de tu vida, quisimos reunir las principales señales o síntomas por las que pasarás en ese momento final, donde tu cuerpo querrá avisarte que es hora de dar a luz, así podrás estar más tranquila al respecto y pasar esta etapa con más tranquilidad.
1. Aumenta el cansancio o fatiga: en esta fase el bebé se hace cada vez más pesado, así mismo el resto de síntomas que experimentarás, lo cual en muchos casos dificulta el sueño y por consiguiente genera un cansancio constante, que realmente será progresivo. Pero para tu beneficio recuerda que el hecho de que este avance, es una gran señal de que falta menos tiempo para la llegada de tu bebé.
2. Vas a respirar mejor: como tu bebé comienza a hacerse más grande y a prepararse para llegar, tu útero se bajará más hacia la pelvis generando más espacio para tus pulmones y estómago, lo cual disminuirá las dificultades gástricas que de pronto pudieras estar presentando y también te permitirá respirar mejor.
3. Aumentan los calambres: esto es una señal de que tu parto se acerca porque, como ya te mencionamos, al estar cada vez más preparado para nacer, tu bebé aumenta de peso y tamaño; generando una presión mayor en tu pelvis, que dificultará el retorno venoso y así mismo presionará las estructuras nerviosas, generando el calambres, dolores en las piernas y en la pelvis
4. Llegan las molestias pélvicas: como ya te mencionamos en esta fase el bebé comienza a bajar más a la zona baja de tu abdomen apoyando su cabeza en tu pelvis, lo cual genera molestia en dicha zona, en ocasiones incluso de manera tan intensa que se dificulta caminar al sentir una gran presión. 
- Los dolores puntuales en la zona baja abdominal, que en muchos casos suelen ser contracciones de Braxton Hicks.
- Dolores bajos en el vientre: que son señales de que el bebé está encajado, pero no necesariamente implica que llega el parto, pues pueden pasar incluso muchos días para este.
5. Aumentarán tus idas al baño: Este síntoma realmente es muy común durante todo el embarazo, pero realmente se hará más marcado en la recta final, pues el espacio de tu vejiga para distenderse es mucho menor.
6. Aumentan las contracciones de Braxton Hicks: Empecemos por volverte a mencionar las famosas contracciones de Braxton Hicks o “contracciones falsas”, pues son uno de los síntomas que más pueden volverse prominentes en esta última etapa, y aunque ya te hablamos anteriormente aquí de ellas, no está de más hacer énfasis para ampliar tu panorama, pues una de sus características es que se pueden confundir con las contracciones reales del parto. Su función específicamente es preparar tu útero para el gran momento, por eso aunque son incómodas, realmente son saludables.
En un inicio serán menos frecuentes, y cuando se comienzan a sentir algunas mamás suelen confundirlas con movimientos del bebé, pero a medida que avanzan las semanas de embarazo comenzarás a notarlas con mayor intensidad, y es posible que así mismo aumenten las molestias que generan.
Algunas de las características que ayudan a diferenciarlas de las contracciones reales son: que son irregulares, es decir que puedes sentir una, la siguiente a los 8 minutos y luego otra a los 3 minutos, a diferencia que las contracciones reales que si son regulares. Su duración es más corta que las contracciones reales y además suelen desaparecer cuando se cambia de posición.
7. Expulsas progresivamente el tapón mucoso: uno de los principales cambios que tiene tu cuerpo cuando comienza tu embarazo es que el cuello del útero se cierra, se alarga y genera en su interior una mucosidad viscosa, que busca como tal, protegerlo de gérmenes o amenazas; pero estos cambios se anulan al final del embarazo cuando se ablanda el cuello uterino, reduce su tamaño y además suelta dicha mucosidad de forma progresiva, inclusive, en algunos casos, sin darse cuenta. Pero aunque sea una señal no es un signo de alarma de parto inminente, hay casos en que pasa un tiempo considerado entre la expulsión de la mucosidad y el momento de dar a luz. 
8. Aumenta el dolor de espalda: esto ocurre especialmente cuando el parto está más cerca, pues el dolor de las contracciones reales comienza en esta zona, especificamente en la zona de los riñones y se comienza a expandir hacia la pelvis y las ingles.
9. Ahora si llegan las contracciones reales: esta es la gran incógnita de muchas mujeres, pues las famosas contracciones falsas (ya mencionadas) confunden al respecto, aunque la mayoría de las mujeres suelen coincidir en que cuando llegan las contracciones reales, son realmente diferentes de las anteriores; pero para darte más información sobre el tema, cuando estés en aquellos tiempos presta atención a las siguientes señales:
- Se reducen en el tiempo y son constantes, empiezan por ejemplo cada 20 minutos, luego cada 15, cada 10, cada 5 y así sucesivamente.
- Como ya te contamos recuerda que son de larga duración.
- No se reducen al cambiar de posición.
10. Cuándo finalmente rompes fuente: durante en el embarazo y al final de este, el flujo vaginal se vuelve más líquido, y en ocasiones este se mezcla con las pérdidas de orina que son generadas por la presión que se está ejerciendo en la vejiga; esto hace que las mamás sientan dudas y se confundan sobre si este fluido significa que se ha roto la bolsa; pero hay otros factores que pueden permitirte evidenciar la diferencia, entre ellos que cuando realmente estás rompiendo fuente la evacuación del líquido es lenta y abundante.
11. Puedes llegar a experimentar el síndrome de nido: el cual consiste en que muchas mamás sienten una necesidad latente de preparar todo para la llega de su bebé, por eso quieren estar limpiando, organizando el cuarto de su bebé, así mismo como comprando lo que le falte para ese gran día.
Recuerda que es importante que busques estar tranquila en esta última fase del embarazo, pues esto te permitirá transmitirle esa misma a tu bebé y estar ambos en la mejor disposición para su llegada.
Con amor, tus amigos por siempre. Cocco & lolo.
