Si estás empezando tu embarazo puede que aún no estés enterada del tema que te vamos a hablar hoy, y son las famosas contracciones de Braxton Hicks o contracciones falsas, pues suceden casi siempre en el tercer trimestre de embarazo, cuando el útero, comienza a hacer ensayos para prepararse al momento del parto real. Sin embargo, ya que en algunos casos, estas pueden darse incluso antes del tercer trimestre, alarmando a la madre, resulta útil conocer más a profundidad el porqué se generan y cómo tratarlas, además de cómo diferenciarlas de las contracciones reales.
Para empezar nos gustaría recordarte o ampliarte información sobre lo que realmente es una contracción, ya que como tal no solo se da durante el embarazo, sino también en otros momentos, como cuando las mujeres tienen su periodo menstrual o cuando hay un orgasmo. Y es específicamente ese movimiento que hace el útero para contraerse, pero que en el embarazo por su parte, dicho movimiento de contracción tiene el objetivo de madurar y dilatar el cuello uterino para facilitar la salida del bebé posteriormente el día del parto; y cuando esto sucede el bebé realiza un desplazamiento hacia abajo, mientras el cérvix por su parte se estira hacia arriba, para irse abriendo poco a poco. En el momento del parto todo este proceso juega un papel fundamental, ya que permite la dilatación.
Estas contracciones suelen presentarse de manera muy irregular, sobre todo cuando la madre permanece un amplio periodo de tiempo de pie o en movimiento, o si alguien toca su vientre con mucha fuerza; y físicamente pueden notarse porque el abdomen en sí se endurece, se contrae o incluso cambia de forma. Se generan específicamente a nivel hormonal porque el cuerpo de la madre disminuye la producción de progesterona y aumenta la producción de oxitocina, que es entre otras cosas, la hormona encargada de favorecer dichas contracciones. Es así como este coctel hormonal las genera, pero lo que muchas madres desconocen o ni siquiera perciben es que dichas contracciones de Braxton Hicks se van a producir durante todo el embarazo, pero en ocasiones serán imperceptibles y solo comenzarán a tomar fuerza cuando se acerque el momento del parto, sin embargo no serán contracciones reales, pero claramente pueden confundir a la madre, pues comenzarán a ser menos irregulares y más frecuentes, pero como te explicamos hace un momento, no son un motivo de alarma, en cambio puede ser útil que sepas cómo diferenciarlas de una contracción real para evitar angustiarse.
¿Cuál es la diferencia entre ambos tipos de contracción?
Un factor principal para diferenciarlas y que muchas mujeres describen, es que las contracciones falsas o de Braxton Hicks no generan dolor, y suelen describirla como un endurecimiento suave e indoloro en el vientre, que viene y se va fácilmente.
- No se generan en intervalos irregulares, ni van aumentando frecuencia al caminar o a medida que pasa el tiempo.
- Se pueden presentar por lo menos unas 10 veces en el día, pero no generan como tales, cambios en el cuello uterino de la madre.
En cambio por su parte las contracciones reales, que ocurren cuando llega el momento del parto, aunque pueden ser diferentes en cada mujer, si producen malestar y dolor, tanto en el vientre como en la espalda y una presión molesta en la pelvis.
Para algunas madres las contracciones reales suelen asemejarse a un fuerte cólico menstrual, mientras que en algunas otras son similares a un cólico fuerte de diarrea.
¿Cómo reaccionar frente a las contracciones de Braxton Hicks?
Ya que sabes con más profundidad en qué consisten las contracciones de Braxton Hicks, será útil que sepas cómo puedes actuar cuando ocurran, para que de igual manera sean menos incómodas para ti:
¿Cómo saber que no estás en trabajo de parto prematuro?
Aunque es un tema delicado y angustiante para la mayoría de las madres, es importante que aprendas a diferenciar las contracciones de Braxton Hicks de un parto prematuro, ya que por información lo mejor que puedes hacer es realmente estar al tanto de tu proceso de embarazo. Frente el parto prematuro, debes saber que este se da antes de la semana 37 de embarazo, especificamente cuando entre la semana 20 y 37, es decir entre los 5 y los 9 meses, y es delicado ya que puede llevar a un aborto espontáneo.
Se puede notar porque la madre experimenta contracciones uterinas regulares, aproximadamente 6 contracciones o más en el transcurso de 1 hora. Las cuales no cesan aún cuando se tome una posición de reposo o se ingiera líquido.
En este caso lo más recomendable es que la madre acuda a su especialista y tome medidas de precaución.
¿Cómo saber que llegó el momento del parto?
Lo importante frente a este tema no es alarmarte cuándo ocurran, sino precisamente diferenciar los tipos de contracciones que puedes tener y saber actuar cuando realmente lleguen las contracciones del parto. Para esto es imprescindible que hagas consciente que las contracciones reales ocurren en el tercer trimestre cuando se está acercando la hora de dar a luz a tu bebé, frente a esto hay unos signos de alarma frente a los cuales sí puedes reaccionar para tomar acción e ir donde tu especialista:
Nuestro objetivo es mantenerte informada sobre todos los procesos que llevarás tanto en tu embarazo como cuando ya haya nacido tu bebé, tanto a nivel médico como de estilo de vida y alimentación, para que estés enterada y al tanto de las tendencias y particularidades que suelen darse, sin embargo como siempre te mencionamos, lo ideal, es que acudas a tu especialista de cabecera para que sea el/ella quien te guíe y asesore con más profesionalismo y énfasis. Esperamos que esta información sea útil para ti.
Con amor, tus amigos por siempre. Cocco & lolo.